Segundo break: La pelea no es entre dos...

Apenas decía que Gelfand tenía que mostrar algo más para trascender y el gran maestro israelí dio sus dos mejores partidas. El juego Gelfand v. Aronian es ya uno de las dos mejores del mundial.

Quizá por sus empates iniciales, casi nadie reparó en el peligro que significaba este jugador, que ha sido ampliamente reconocido por Kasparov por su enorme talento teórico.

También en la sala de análisis, Zurab Asmaiparashvili y Susan Polgar, hablaron con entusiasmo sobre la brillante carrera de Gelfand. La pregunta es si conservará el resto del torneo toda la agresividad y la fortaleza necesarias para la difícil ruta hacia la cima.

De hecho, durante las conferencias de prensa, Anand y Gelfand coincidieron en que este tipo de competencias se deben ganar "ronda por ronda", sin presionarse tanto psicológicamente por la tabla de posiciones, sino más bien tratando de jugar al máximo en cada partida.

Quien mejor se ve en esta carrera, más allá de su medio punto de ventaja, es Anand. Ha podido neutralizar bastante bien el juego de sus adversarios llevando las piezas negras y en la sala de prensa se le ve sonriente, tranquilo y cuando la ocasión lo amerita, respondiendo a todas las preguntas en perfecto español.

Anand sorteó con éxito el ataque Marshall de Svidler

Contrariamente a lo que pudiera pensarse, parece que el más presionado ahora será Kramnik en su calidad de campeón defensor. Luchó con intensidad contra Gelfand y en mucho menor medida contra Svidler y Aronian, pero simplemente suma menos victorias que Anand y cada vez hay menos terreno para especulaciones. Falta todavía bastante por ver, pero la partida del lunes Kramnik-Anand puede dar la clave decisiva sobre quién será el próximo campeón.

El líder ante la etapa crucial del mundial

Por su parte, Leko aún puede tomar un impulso importante después de su gran triunfo con Grischuk y ya bien recuperado del "blunder" en su partida con Aronian.

Leko explica su victoria a la prensa frente a un abatido Grischuk

Del resto de los jugadores: Grischuk ha jugado bien en términos generales, pero parece que está pagando "derecho de piso" en este fortísimo torneo. Aronian está enfermo y ojalá se sienta en óptimas condiciones para los próximos días. Morozevich está jugando muy revolucionado. Hace sacrificios de peones que luego no puede compensar y ya salvó demasiados finales inferiores. Finalmente, Svidler es el único que aún no gana y necesitará un auténtico revulsivo para recuperarse en las rondas finales.